El mundo de las dietas, nos ha dejado incontable número reglas que nos dicen cómo, cuándo y cuánto comer. Estas restricciones, nos pueden producir un efecto contrario al que deseamos pues nos generan una mala relación con la comida y por ende una mala relación con nuestro cuerpo.
Muchas de estas reglas son en ocasiones poco verdaderas o innecesarias, incluso restrictivas que nos impiden tener una alimentación realmente sana y feliz.
Ahora, no todas las reglas aplican para todos, tenemos que tener en cuenta que somos personas con cuerpos, gustos, culturas, presupuesto e historiales médicos diferentes, por lo cual todas las reglas de las dietas pueden no servirte.
Aquí te van algunas de las reglas que debes dejar de creer según los nutriólogos especialstas!
No comas después de las 10:00 pm
Dejar de comer a una hora determinada puede ser más perjudicial de lo que parece (a menos que comer antes de dormir te provoque indigestión). Según la Nut. Dalina Soto y fundadora de Nutritivesly Yours, lo interesante de imponer horarios para dejar de comer, puede estar contribuyendo a que tengas más antojos nocturnos. Para Vincci Tsui, nutrióloga «anti-dieta» y consejera certificada de alimentación intuitiva, cuando nos damos permiso de ir a la cocina, los refrigerios nocturnos pueden volverse menos atractivos.
No comas emocionalmente
Para nosotros comer es emocional, Lindsay Birchfield, activista de la salud, y el cuerpo y dietista de creando la paz con los alimentos y el cuidado de la salud del corazón arraigad dice “Comemos para celebrar y comemos para llorar”
Comer cuando nos sentimos tristes o felices es un mecanismo de afrontamiento, se vuelve una herramienta destinada a ayudarnos a sobrevivir, manejar el estrés y sentirse mejor o buscar consuelo cuando es necesario, es parte de tener una relación saludable con la comida que incluye concederse permisos para comer cuando se presenten emociones dolorosas, sin embargo siempre ten en cuenta a tu nutriólogo o proveedor de salud mental.
No te excedas con la fruta dulce
Erica Leon, terapeuta nutricional y dietista certificada en trastornos alimenticios dice que la fruta proporciona fibra y una variedad de vitaminas y minerales esenciales, sin mencionar el sabor, la fibra de estas frutas ayuda a llenarte mientras ralentiza la velocidad con que tu cuerpo absorbe el azúcar de la fruta, lo que realmente ayuda a mantener los niveles de azúcar y energía en sangre más estables.
Bebe un vaso de agua cuando tengas hambre
La sed indica que el cuerpo está deshidratado, el hambre indica que el cuerpo necesita energía, contrario a esta regla, beber agua cuando tienes hambre puede ayudarte tal vez una hora, sin embargo ocasiona que cuando tengas hambre de nuevo comas sin controlarte según Carolina Guízar fundadora de Eathority y cofundadora de Latinx Healt Collective “cuanto más demores en alimentar tu cuerpo, más hambre tendrá y menor será el control en tu comida” Así que mantente hidratado, pero si tienes hambre come, para esto pueden ser buen implementar snacks nutritivos entre tus comidas.
Comer siempre en la mesa
Esta regla suena bastante lógica si no tienes un estilo de vida agitado, muchas veces por los distintos tipos de vida que llevamos cada uno, nos resulta difícil sentarnos a comer en una mesa con tranquilidad, al imponernos esta regla muchas veces nos podemos sentir mal por no cumplirla al pie de la letra, sin embargo, algunas comidas pueden resultar desordenadas y apuradas y no está mal, incluso comer entre varios zooms cuenta como una comida.
Así que ya sabes tener una buena relación con la comida es la mejor manera de llevar tu alimentación, no te limites, disfruta cada comida y sigue cuidando tu alimentación con la ayuda de un nutriólogo que tome en cuenta el tipo de vida que tienes.